Releyendo los comentarios que ya he hecho de otras novelas de Donna Leon, encuentro que podría copiar cualquiera de ellos para esta y sería perfectamente válido.
La alegría que me da cuando veo en la librería que ha salido un nuevo libro sigue siendo la misma, y las ganas con las que lo cojo, a ser posible en fin de semana para no parar hasta leerlo, también son las mismas. Así como la sensación de que se queda muy corto, de que me gustaría poder estar más tiempo inmersa en la historia.
Cambian las tramas, pero no la filosofía de Brunetti, del que en cada novela conocemos un poco más, tanto de su vida y su historia como de su filosofía, pese a que pudiera parecer que ya lo sabemos todo. Y Venecia sigue siendo ese lugar mágico que protagoniza de algún modo todas las novelas.
Ahora sólo queda esperar la próxima, que mucho me temo que tardará otro año (también como de costumbre).
La alegría que me da cuando veo en la librería que ha salido un nuevo libro sigue siendo la misma, y las ganas con las que lo cojo, a ser posible en fin de semana para no parar hasta leerlo, también son las mismas. Así como la sensación de que se queda muy corto, de que me gustaría poder estar más tiempo inmersa en la historia.
Cambian las tramas, pero no la filosofía de Brunetti, del que en cada novela conocemos un poco más, tanto de su vida y su historia como de su filosofía, pese a que pudiera parecer que ya lo sabemos todo. Y Venecia sigue siendo ese lugar mágico que protagoniza de algún modo todas las novelas.
Ahora sólo queda esperar la próxima, que mucho me temo que tardará otro año (también como de costumbre).
Sinopsis