domingo, 3 de julio de 2011

Historia de la ciencia sin los trozos aburridos (Ian Crofton)

Esta semana en la que he tenido poco tiempo, y especialmente durante el fin de semana que ha sido bastante agitado, voy a aprovechar para comentar este libro de Ian Crofton, que en realidad llevo leyendo a ratos perdidos desde hace ya varias semanas.
Y es que, como su nombre puede dar a entender, nos cuenta curiosidades y anécdotas del mundo de la ciencia de forma breve (las más extensas no tienen más que un par de páginas, y hay muchas de un párrafo simplemente), lo que hace que resulte útil para leer de vez en cuando y poco a poco.
Aunque lógicamente algunas de ellas son bastante conocidas, como el caso de Arquímedes y la bañera, son las menos, y la mayoría son bastante inéditas y suficientemente curiosas como para que resulte entretenida su lectura.
Así, vamos viendo la evolución desde la antigüedad hasta nuestros días de disciplinas como las matemáticas, la astronomía o la medicina, con ejemplos como las primeras operaciones de cirujía estética allá por el año 2000 a.C. o los primeros métodos de control de natalidad practicados en Egipto hacia el 1850 a.C.
También aparecen supersticiones y creencias de todo tipo, algunas de las cuals nos parecen hoy en día auténticas barbaridades y otras que con el tiempo se fueron demostrando.
Por otro lado, podemos encontrar anécdotas de los científicos, como que Einstein no habló hasta los 3 años y medios para decir que la leche estaba caliente, ya que hasta entonces no había tenido necesidad porque todo había sido correcto. O que Kekulé fue inspirado en un sueño para descubrir la estructura del átomo de benceno, al igual que Mendeliev para descubrir la tabla periódica.
Otros ejemplos que se me ocurren son que ya en el año 100 a.C. aparecen las primeras rubias teñidas, ya que las peluqueras romanas comenzaron a decolorar el cabello a sus clientas. O que el estetoscopio lo inventó un médico pudoroso que no se atrevía a acercar su cabeza al pecho de una paciente para escuchar el corazón. O que cuando se inventó el teléfono nadie le veía mucho la utilidad... O que en 1918 se aconsejaba que los niños vistieran de rosa y las niñas de azul...
Y terminaré con un genio de las predicciones, Lord Kelvin (el de la temperatura), que dijo frases como: "Las máquinas voladoras más pesadas que el aire son imposibles", "La radio no tiene futuro" o "Ahora no hay nada nuevo que descubrir en física (año 1900)".
Como véis, ciencia asequible para todos los públicos.

Sinopsis

¡Emociónate! Como cuando los astrónomos detectaron un misterioso "Wow" del espacio exterior.
¡Grita! Como los matemáticos cuando encontraron un número tan grande que no cabría en todo el Universo.
¡Pregúntate! Como los rayor mortíferos de Arquímedes destruían naves hace 2000 años.
¡Ríete! Como un distraido Isaac Newton al ver que había cocido su reloj mientras miraba la hora en un huevo.
¡Vomita! Como los cirujanos rusos cuando cosieron la cabeza de un cachorro a un perro.
¡Asómbrate! Y prueba las frambuesas que puedes encontrar en la vía láctea.
¡Alucina a tus amigos! Con historias de babas, monos voladores, barbas incandescentes, cadáveres que guiñan los ojos, máquinas de vapor antiguas, supositorios radioactivos, barro comestible, y mucho, mucho, mucho más...

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